El Juli, enorme, indulta un toro en Arles

Arles (Francia). Domingo 8 de septiembre de 2013

Corrida Goyesca. Lleno. Toros de Domingo Hernández, el segundo, 'Velero', nº 103, premiado con el indulto.

Enrique Ponce (de azul y bordado en negro y oro) silencio y silencio; El Juli (de nazareno y bordado en negro) dos orejas y rabo simbólicos y ovación; y Juan Bautista (de negro y bordado en blanco) dos orejas y dos orejas.

aplausos

La apoteosis de una variada tarde llegó en el segundo. "Velero" de nombre el de Domnigo Hernández, tuvo la suerte de toparse con un torero en plenitud llamado Julián López "El Juli". De buena condición en la muleta tras no destacar en varas, repitió en la muleta del madrileño incansable, que lo cuajó de principio a fin. Desde los doblones iniciales, pasando por las tandas de muletazos largos y poderosos sobre ambas manos. Los molinetes enterrando la muleta en la arena, antológicos. Faena larga, el público entregado pide el indulto que se acaba concediendo. Rabo para Juli, quinto que pasea en esta plaza.

Impecable de nuevo El Juli con el quinto. Noble el toro pero con el defecto de puntear los engaños. Lo sujetó el madrileño para ir afianzando su embestida para acabar toreándolo a placer sobre ambas manos. Embraguetado el torero en dos grandes tandas por el pitón derecho en las que el toro se sintió podido y echó la persiana. Final por manoletinas muy ceñidas y dos pinchazos previos a la estocada que le dejaron sin premio. Rolland Angel

mundotoro

El Juli hizo de su regreso a la plaza de toros de Arles un momento memorable: indultó al segundo de la tarde, un excelente toro de Domingo Hernández, de nombre 'Veronés' y se inventó una faena con el cuarto, con el que no acertó con la espada. Salió en hombros junto a Juan Bautista, que no se amilanó en ningún momento y firmó una actuación de alto nivel: cortó cuatro orejas. Gran espectáculo el que brindaron los dos toreros. Completaba el cartel Enrique Ponce, que nada pudo hacer con su lote salvo demostrar disposición. Se lidiaron toros de Domingo Hernández. Otra buena noticia, la entrada: lleno.

El Juli indultó al segundo toro de la tarde, un ejemplar de Domingo Hernández al que recibió por verónicas. El toro empujó en el caballo y el de Velilla hizo crujir el Coliseo con un quite por chicuelinas. Replicó Bautista por gaoneras. Ya con la muleta, tras brindar al público, se dobló con él hasta los medios para después, citándolo largo, lo toreó sobre el derecho con profundidad, largura y mano baja. El toro se arrancó con alegría y repitió, en otra tanda sobre esa mano. al natural, naturales muy templados y largos, y el toro embistiendo con clase. Regresó después a la derecha, para cerrar con muletazos de mano baja y molinetes. La plaza empezó a pedir el indulto, que finalmente le fue concedido, tras escuchar un aviso.

Enseñó a embestir al quinto de la tarde, con el que Bautista había firmado un quite por chicuelinas. El Juli lo sometió en los medios a base de muletazos poderosos, para embarcar las embestidas del toro. Acabó metido entre los pitones y cerró la faena, en la que lo puso todo él, con manoletias muy ceñidas. La espada no le acompañó y fue ovacionado. Mica Cressenty