Salamanca: El Juli, soberbio, por la puerta grande
Fecha | Plaza | Cartel | Ganadería | Resultados |
---|---|---|---|---|
14/09/2011 | Salamanca | Pablo Hermoso, El Juli, Manzanares | El Pilar | Oreja y oreja |
Salamanca. Miércoles 14 de septiembre de 2011.
Sexta de
Hermoso de Mendoza, ovación y dos orejas; El Juli (de verde hoja y oro) oreja y oreja; y José María Manzanares (de nazareno y oro) silencio y ovación.
“Julián López ‘El Juli’ cortó una oreja ante su primer oponente, un toro que rehuyó la pelea en los instantes iniciales de la lidia pero que tras el tercio de banderillas se vino arriba. El Juli le planteó la faena en los medios, toreando con poder y mando, obligando al toro que respondió humillando en varias series de mucha emoción. Lo sujetó el madrileño y lo tapó en los medios hasta que terminó por rajarse. A pesar de un pinchazo previo a la estocada paseó un trofeo. Otro trofeo sumó de su segundo enemigo, un ejemplar que tuvo un gran pitón derecho. Eso lo aprovechó el madrileño para fundamentar su trasteo por ese lado toreando con temple y profundidad en series de mucha intensidad. Por el izquierdo el toro se quedó más corto. Tras una buena estocada, el toro tardó en rodar, enfrió la petición y perdió una más que posible segunda oreja”. Paco Cañamero (aplausos.es)
“Calor bochornoso y run run de cante grande cuando El Juli abrió el capote para recibir al segundo, un toro de El Pilar sin opciones en los primeros tercios, habitual de salida en la casa, y que cambió radical cuando se puso a embestir repitiendo con fijeza en las telas del madrileño. Llegó un momento en el que se produjo una entrega total de toro y torero y la plaza vibró con las emocionantes embestidas por abajo del de Moisés. El toro por el derecho hacía el avión y El Juli dio una auténtica lección de poder, de convencer y de torear. Dos circulares completos pusieron la plaza en pie. La espada dejó el premio en una oreja. Al quinto le costó vaciarse en el capote y destacó un quite por chicuelinas ajustadas de mano baja. Con Duquesa de Alba incluida y saludando una fortísima ovación del respetable de pandereta, el torero tuvo que esperar a que acabase para poder seguir a lo suyo. Lo suyo que fue una faena despaciosa y templada con uno de El Pilar que embestía emocionante y profundo, con mucha emotividad por el pitón izquierdo y largo y sometido por el derecho. Molinetes en el inicio de las tandas de la fase final de un Juli enorme difícil de describir con palabras. Nunca se sintió tan ayudado para entrar a matar ya que cada alma empujó la espada para que abriese la puerta grande”. Mónica Alaejos (mundotoro)