Manizales: Tres orejas para El Juli, que sigue arrasando en América

Video del gran triunfo de El Juli (mundotoro.tv)

Manizales (Colombia). Viernes 8 de enero de 2010.

Quinta de la Feria de Manizales. Lleno completo. Toros de Las Ventas del Espíritu Santo, el tercero, de nombre Detenido, fue indultado.

El Juli (de verde botella y oro) oreja y dos orejas; Sebastián Castella (de lila y oro) dos orejas simbólicas y oreja; y Juan Solanilla (de gris perla y plata) que tomaba la alternativa, ovación y oreja.

“Tres orejas, una de su primero y las dos de su segundo, fue el balance triunfal de un torero excepcional: Julián López El Juli, quien realizó dos faenas llenas de emoción, entrega y torería. En ambos dictó una cátedra de bien torear, y de técnica. Con razón ocupa el sitial de primerísima figura, y con razón las plazas se llenan al conjuro de su nombre. Puso a los aficionados en vilo cuando se metió en los pitones de Mestizo su segundo toro para prodigarle muletazos imposibles y al final lo mandó sin orejas para el destazadero”. Alberto Lopera (mundotoro.com)

“El Juli construyó a su primero una faena inteligente en la que supo tapar los defectos de un ejemplar noble pero justo de raza. Mando, temple mano baja y ligazón fueron las clavres. La media que le recetó fue suficiente para hacerle doblar. Al segundo lo toreó bien a la verónica, rematando con una larga su saludo capotero. Con la muleta, cuajó una importante faena a un toro a menos que acabó parándose. Algunos muletazos de rodillas, incluido un torerísimo desplante, precedieron a una estocada casi entera”. Germán Jiménez (burladero.com).

“Volvió a aplicar su cátedra para sacar a Balsa, de 446 kilos, de sus insistentes preparativos a la querencia. Lo obligó a rendirse hasta el punto de entregar una de sus orejas. Lo suyo, que es el arte puro, volvió a ponerse en las lecciones del buen torear. Con Mestizo, de 500 kilos, su segundo toro, repitió el método para hacer potable lo impotable. Hizo sonar la música con la batuta de su porfía y ganó en buena lid dos orejas. El manso fue pitado al arrastre”. Redacción/El Pregonero (lapatria.com)