Crónicas

Crónicas de Julián López

Juriquilla: El Juli vuelve a cortar otras dos orejas tras una faena portentosa

Fecha Plaza Cartel Ganadería Resultados
28/11/2009 Juriquilla Fernando Ochoa, El Juli, Macías Xajay Dos orejas y ovación

Juriquilla (México). Sábado 28 de noviembre de 2009
Segunda corrida extraordinaria en la plaza "Provincia Juriquilla". Lleno. Toros de Xajay.
Fernando Ochoa (negro y oro) palmas y oreja; El Juli (grana y oro) dos orejas y ovación; y Arturo Macías (uva y oro) palmas y palmas.



"Si la noche de ayer Julián López "El Juli" había echado mano de sus recursos para imponerse con maestría, hoy sacó a relucir esa faceta de artista que todavía algunos le niegan, y y se prodigó toreando al natural en un trasteo de altos vuelos que le granjeó la segunda puerta grande consecutiva en Juriquilla, ante el asombro del público y el reconocimiento de todos los profesionales que poblaban el callejón. Y es que no parecía que aquel segundo toro de la corrida tuviese ese fondo de calidad hasta que el madrileño le dejó la muleta muerta por la arena y tiró de él, una y otra vez, en la distancia precisa, con el temple precioso, en naturales deletreados en los que detuvo el tiempo. Los cambios de mano, andándole al de Xajay fueron portentosos, ya cuando la gente había saboreado cada uno de los muletazos, tanto por su cadencia como por su profundidad. El Juli estaba feliz porque había conseguido torear para él, despojado de cualquier presión de triunfo, abandonado a su entrega y recreándose en las suertes. La media estocada en lo alto que tiró sin puntilla al toro, hizo estallar de entusiasmo al público que no dudó en premiarlo con dos merecidas orejas que paseó gustoso en la vuelta al ruedo. El quinto era un toro de pelo salinero, hondo, de cabeza fina y bien puesta, que de salida intentó saltar al callejón y llegó un tanto ahogado a la muleta, pues cargaba más de 550 kilos sobre los lomos. No obstante, Julián insistió sin reserva hasta sacarle provechó en una faena inteligente y medida que, debido a la falta de continuidad en las embestidas, no terminó de coger vuelo a pesar del arrimón que causó revuelo cuando ejecutó varios muletazos por alto sin enmendarse. Al final de la lidia, la gente le ovacionó con cariño tras la nueva demostración de ese nivel que ha conseguido a lo largo de los años, convertido en una respetadísima figura del toreo, capaz de llenar dos tardes seguidas este hermoso escenario, donde ha brindado grandes tardes de toros". Juan Antonio de Labra (mundotoromexico)


Compartir en facebook Compartir en twitter