Con casi lleno se han lidiado seis toros de Jandilla, destacó el lidiado en sexto lugar, excepcional, de embestida franca y templada; de mal juego y con peligro primero y cuarto.

El Juli (de salmón y oro) ovación y silencio; Juan Bautista (de gris y oro) oreja y ovación; y Eduardo Gallo (de salmón y oro) ovación y oreja

Julián López “El Juli” venía con ganas a Bilbao, una de las plazas en las que más triunfos importantes ha logrado a lo largo de su carrera. Prueba de su entrega fue la larga cambiada, en medio del barrizal y de los charcos nacidos de la insistente lluvia caída sobre el bocho, con la que recibió al primero de su lote, un jabonero sin clase ni entrega, incómodo hasta el límite y sin dejar de berrear en toda la lidia. El Juli lo quitó por chicuelinas y comenzó la faena aguantando las embestidas nada nítidas del astado. Para colmo, el viento molesto lo suyo. Sopló a rachas toda la tarde, pero con más insistencia durante los toros primero y cuarto. Valiente Julián que tuvo que abreviar visto el material que tenía en frente. Gran estocada, de la que salió rebotado, con la camisa rota y con el toro persiguiendo a su presa hasta que cayó fulminado al cabo de unos pocos segundos. La ovación, de gala.