Con cerca de tres cuartos de entrada se han lidiado seis toros de José Luis Marca

César Rincón (de canela y oro) ovación y ovación; Enrique Ponce (de marfil y oro) ovación y ovación, y El Juli (de nazareno y oro) dos orejas y dos orejas.

El Juli salió en hombros

“El Juli está hecho un monstruo”. Por Francisco Orgambides (Diario de Cádiz)

 El Juli está hecho un figurón, un monstruo de lo suyo, que es torear. Da gusto verlo en la plaza y ayer en su presentación en Sanlúcar desorejó sus dos toros tras dos faenas importantes.

 Ayer dio argumentos para unos y otros. Para los que afirman que es un figurón imprescindible en las ferias, puso en la balanza sus ganas, su saber, su manera de colocarse y manejar los engaños y dos rotundas estocadas.

 En Sanlúcar ayer fue indiscutible triunfador. No hubo más. La corrida tuvo muy poco dentro pero él supo engolosinar a su burraco y terciado primero colocándose muy bien y ofreciendo la muleta con ortodoxia hasta armar una faena completa, por ambos pitones, con su aliño de inspiración. El toro berreón, sin entregarse de salida como todos sus hermanos y saliendo de las suertes a su aire, cambió en manos de El Juli, imantado por el temple del madrileño, que le recetó una estocada a ley en todo lo alto.

 Y no digamos nada del sexto, otro que tal bailaba de salida -la corrida apenas pudo ser toreada de capote- pero que se encontró con un gigante muy bien colocado en los embroques que le hizo embestir por la derecha. El Juli supo lo que se podía hacer y lo hizo y el público se rindió ante una nueva estocada entrando muy seguro y despacio.

 “Sanlúcar estalla por bulerías para El Juli”. Por Ana Pedrero (burladero.es)

 La gran faena que cuajó Julián López “El Juli” al primero de su lote compensó por sí sola la asistencia a la segunda de la Feria de La Manzanilla de Sanlúcar de Barrameda. El cartel lo tenía todo: la presencia del maestro Rincón y la de dos primeras figuras del toreo, como son Enrique Ponce y “El Juli”, que ayer ratificó el excelente momento que atraviesa. A la terna, sumar como aliciente el coso de El Pino, precioso tras las reformas acometidas por César González, quien ha dejado la plaza como una bombonera.

 Ayer, sin duda, los que perdieron fueron los que no estaban, porque la plaza vivió una faena inolvidable, de esas que quedan en la memoria de los aficionados. Fue en el tercero de la tarde, un toro que salió suelto en el capote y en el caballo, pero que en la muleta fue a más y se destapó como un prodigio de nobleza y clase por ambos pitones. Claro, que enfrente tuvo a Julián López “El Juli”, que supo aprovechar todo lo bueno que el toro tenía y lo llevó templado y con regusto, con muletazos limpísimos y ligados y la muleta arrastrada por el suelo.

 Fue tan bonito, de tanta ley, que resulta difícil trasladar al ordenador el sentimiento de una plaza entregada, de unos tendidos literalmente volcados con el torero, que dio una lección magistral, rematada con un estocadón que sirvió para desorejar al animal de forma incontestable. Ya antes de doblar, Sanlúcar se puso en pie y estalló por bulerías, que es el cante de la fiesta y de la alegría; que en el rincón es el compás de las faenas de tronío.

 “Gran tarde de toros de El Juli, que cortó cuatro orejas”. Por Álvaro Acevedo (Mundotoro.com)

 El Juli ha dado una gran tarde de toros hoy en Sanlúcar (Cádiz) y ha cortado cuatro orejas, saliendo en hombros por la Puerta Grande. La faena a su primero ha sido magistral, y al sexto, menos bueno que el tercero, lo ha entendido perfectamente hasta meterlo en la canasta.

 Foto: Carmen Castiñeira (burladero.es)