Fecha | Plaza | Cartel | Ganadería | Resultados |
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06/12/2004 | Quito | El Juli, El Cid, Guillermo Albán | Huagrahuasi, Triana | Ovación y oreja |
QUITO (Ecuador). Lunes, 6 de diciembre de 2004
Sólo el fallo a espadas le impidió a Julián cortar tres orejas
Con otro gran lleno de "No hay billetes" en los tendidos se han lidiado tres toros de TRIANA (1º, 4º y 5ª) y otros tres de HUAGRAHUASI (2º, 3º y 6º)
EL JULI (Ovación y oreja)
GUILLERMO ALBÁN (Oreja y ovación)
EL CID –que confirmaba alternativa (Vuelta y ovación)
Por Carlos Narváez (Mundotoro)
El Juli logró un trofeo del cuarto, un toro que llegó a la muleta renuente, con brusquedad y a la defensiva. El madrileño manejó muy bien la capa toda la tarde, con un toreo a la verónica mecido y al ralentí, a la vez que variado en quites. Brindó esa faena al que fuera su apoderado Manolo Lozano, con un inicio de mano muy baja y rompedor. El astado acusó ese esfuerzo y se paró, teniendo El Juli que meterse entre los pitones en trasteo valeroso y entregado. Mató bien y se pidió con fuerza la oreja concedida.
A su primero lo picó muy bien Diego Ortiz, pero a partir de ahí el animal se acobardó. El Juli inició faena sacándolo hacia los medios con muletazos vistosos y sin molestar, andando al animal. Tras una tanda con la diestra y otra al natural muy poderosas, con media muleta arrastrada por la arena, el toro dijo basta, y el madrileño tuvo que cambiar de registro y torear en la distancia corta.
Por Fabián Cuesta (Burladerodos)
Julián López "El Juli" volvió a estar enorme esta tarde. En su primero brilló su rotundo toreo con la muleta, rompiendo al toro en series de muletazos con la mano diestra, con mucho sustento. Su trasteo fue emocionante, pues el madrileño expuso sus carnes ante la reservona embestida del toro. Pinchó hasta tres veces y la cosa quedó sólo en una fortísima ovación que el diestro agradeció desde el tercio. En su segundo se pegó un arrimón auténtico, sin trampa ni cartón, en una faena esforzada y vibrante. Mató de media estocada algo trasera pero de efecto inmediato, y le fue concedida la oreja del bruto.