Es el vestido de luces que con mas fuerza pasará a la historia, pues se trata del que utilizó Julián en la alternativa en Nimes y en la confirmación en La México. En Nimes se lanzó al estrellato y en la Plaza México, el 6 de diciembre, escribió una de las más bellas páginas del toreo de México al inmortalizar a Platero, de Santiago, en memorable faena. A pesar de pinchar lo llevaron en hombros hasta el hotel. Aunque luego lo lució en cosos americanos e incluso en algunos de la temporada europea del 99, el blanco y oro pasará a la historia como el traje que llevó Julián en estos dos acontecimientos tan sumamente importantes para su biografía