“Más fuerte, ensillado, algo cuesta arriba y engatillado de pitones, el castaño lucero que hizo cuarto no se desplazó de salida. El Juli brilló en el quite por chicuelinas. Sangró y recibió el justo castigo en el caballo. Fue encastado el ‘Alcurrucén‘ y encastado fue también Julián, que le instrumentó una importante faena de mando y temple por ambas manos, de principio a fin. Tras una estocada caída, fue premiado con una oreja de ley. Bajo, armónico y de lomo recto, el primero adoleció de fuerza de salida y no permitió brillar en el saludo de recibo a El Juli, que sí pudo dejar una bonita media de remate. Con buen criterio, midieron el castigo en varas. A base de mucho pulso y no menos suavidad, El Juli fue consintiéndolo en una faena de temple y mando en la que terminó sometiendo a un toro que tuvo una gran nobleza extrayendo series de largo trazo y temple por ambos pitones. Dejó media estocada y eso hizo que todo quedara en silencio tras aviso”. Maribel Pérez (Mundotoro).
“El primero de la tarde fue un toro flojo ante el cual El Juli poco pudo hacer con el capote. Cuidaron al animal a lo largo de la lidia, lo que permitió que llegara al último tercio mostrando escasez de fuerzas pero con una clase y nobleza que sirvió para que, en manos del madrileño, se pudiese ver una faena completa, con muletazos largos y suaves. Buena actuación de Juli, malograda con los aceros. El castaño lucero que hizo cuarto no se desplazó de salida, lo que impidió el lucimiento de El Juli con el capote. Donde sí brilló fue en el quite por chicuelinas. Encastado el de Alcurrucén, sirvió para que El Juli le cuajase una importante faena sobre ambas manos donde el mando, el dominio y el temple fueron los pilares fundamentales de su actuación. Estocada caída y oreja”. B. Ponte (Aplausos).
Pontevedra, domingo 5 de agosto de 2018. Feria de la Peregrina. Más de tres cuartos de entrada. Toros de Alcurrucén.
El Juli (de caldero y oro) silencio y oreja; José María Manzanares (de burdeos y oro) ovación tras petición y ovación; y Roca Rey (de blanco y plata) ovación y oreja.
Fotos: Verónica Domínguez
Volver